Autor: solentiname
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Je suis la Solé
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desde la isla de
Dejamos Amsterdam atrás, esta vez en la fecha correcta, con el tren correcto. De por sí, llovió toda la mañana y aprovechamos hasta el último minuto antes del check out. En la recepción del hotel ya se amontonaban las chiquillas estridentes, con frenillos, colitas, hotpants y jackets, jalando unas maletas casi tan grandes como ellas,…
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Cartas de Sole van Niejts. Día Dos
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desde la isla de
Vincent, querido: La única forma de verte, es en el museo, pero tomando la precaución de comprar las entradas con anticipación en internet, para no hacer una fila infernal de unas cuatro horas. Es, como sabrás, un museo pequeño, con poquitas obras tuyas, porque la mayoría están en otras partes del mundo. Al menos se…
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Cartas de Sole van Niejts. Día Uno
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desde la isla de
Meine liebe Cornelia, La colonización tiene sus venganzas y si los holandeses dominaron los mares, Indonesia, Sudáfrica, Java, Japón y Surinam y fueron el país más rico de los 1600, ahora lo están pagando en la cantidad desbordante de turistas que parecen inundar la ciudad todos los días, a todas horas, bajando desde la estación…
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System Glitchen
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desde la isla de
Glitch eins: Estos días eternos, que rinden montones, que obligan a dormirse con luz del sol y a las 4 de la mañana, ya está de nuevo iluminado, como si te robaran vida, o en este caso, sueño, todo bajo un sol inclemente y un calor de mierda. El ciclo circadiano y el despertador biológico…
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De paseo
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desde la isla de
Huimos hacia el noreste, a una finquita de fin de semana, en un ride a cargo del novio de la gringa amiga de mi amiga. El novio en cuestión, un mae con pinta brava de árabe, peludo, oscuro, moreno, ojeroso, patán y machista, que confirma llamarse Sean, un nombre profundamente irlandés, aunque dice ser iraní.…
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Blicke auf Berlin
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desde la isla de
Es llegar y recuperar la sensación de la sonrisa, el agradecimiento de una casa y un corazón que me recibieron, la familia que ahora es mía y me espera, cinco años después y esta ciudad prestada la sigo sintiendo como mía. En el S-bahn, este caballero inglés de pasaporte español cuenta como al morir su…
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No puedo seguir buscando tu aroma en el viento
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desde la isla de
Era una escala camino al viaje de verdad y era eso o volar 30 horas seguidas. Así que nos quedamos un día. Debimos habernos quedado más. No sé si es cierto que en un día no conoce uno una ciudad. Si acaso las calles más llenas de turistas. Sé que unas horas bastan para enamorar.…
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Arrieros somos
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desde la isla de
Precisamente ayer en la mañana, discutía yo con Emil, a medias entre tuits y DMs sobre lo ocurrido en el desfile Pride de Sao Paulo. Según las fotos que le deben haber dado vuelta a todo América, un trans hizo de Cristo crucificado y sangrante, dos de Cristos apretándose y otras linduras. Yo me trepé…
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Happy Pride
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desde la isla de
Nini: Hay cosas que jamás me imaginé. La Internet, por ejemplo, incluyendo Google y la forma grosera que le ha bajado el valor al conocimiento acumulado en el cerebro, desenmascarando que ahora funciona más la capacidad de análisis que la de memoria. No me imaginé tampoco, nunca, que llegaría a ver una decisión de la…