Todas las mañanas vivo el milagro del amanecer mientras estoy en el agua.
Salgo del agua tibia, oscura, que atravieso con los ojos cerrados y de repente, al tomar aire, ahí está: la luz que me obliga a abrir los ojos y admirarla.
También es tibia.
Mucho más temprano que tarde, de nuevo se abrirán las anchas alamedas por donde pase el hombre libre para construir una sociedad mejor.
—
desde la isla de
Todas las mañanas vivo el milagro del amanecer mientras estoy en el agua.
Salgo del agua tibia, oscura, que atravieso con los ojos cerrados y de repente, al tomar aire, ahí está: la luz que me obliga a abrir los ojos y admirarla.
También es tibia.
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