Me pasó de todo. Se murió la compu. Se le fue el volumen al tele. Un carro delante de mí no se dio cuenta y la llanta de repuesto se le cayó en media pista y le pasé por encima. Me entucaron en una cafetería. A la que llegué tarde porque había mucha presa. Mi amiga tuvo que poner a dormir a su perrita y lloramos juntas. Me tocó re-asumir un juicio que ya había celebrado quitarme de encima. Me notificaron del juicio que me da mucho miedo. Perdí una apelación. Y me enredé en la pijama y se caí y me golpié la cabeza, la rodilla, 3 dedos, la barbilla. Pero estoy tranquila. No la he perdido. Aun.
Estoy convencida que mi baja de peso no fue por disciplina. Fue la crisis ansiosa
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