Mucho más temprano que tarde, de nuevo se abrirán las anchas alamedas por donde pase el hombre libre para construir una sociedad mejor.

Así no

Ayer teníamos una reunión para decirle a una empresa que queríamos terminar la relación con ellos porque no cumplieron a tiempo y además porque le deben dinero a la CCSS y no tienen póliza de riesgos del trabajo.

Al inicio, la responsable no prendió la cámara. Todos los demás sí.

A pesar de eso, aceptó, en apariencia tranquilamente, la decisión.

Pero luego se fue encanfinando.

Que le dijeron que sí verbalmente/ Bueno, no hay nada escrito que lo confirme

Que hay una oferta de trabajo y un contrato/ Ninguno se firmó

Que yo empecé a dar servicio porque me lo pidieron/ Diay, para ser una empresa de tanta experiencia como dice tener, no debió asumir ese riesgo sin tener nada firmado.

Que los requerimientos que ustedes me dieron estaban pésimos y si mejoraron, fue gracias a mí/ Sí, el manejo nuestro no fue el mejor, pero estamos tomando las medidas disciplinarias internas. Y no tenemos quejas suyas al respecto

Que todo el mundo quiere trabajar conmigo/ Tome el trofeo

y la cereza del pastel:

Me deberían pagar más de lo que me ofrecen, porque esto se lo están haciendo a una pyme, all women, pequeñita y ustedes son una empresa grandota, multinacional, seria

Aquí es donde a mí se me sale la sonrisa maligna de Ah sí? A ver: esto no es una agresión del heteropatriarcado ni yo ni la empresa somos parte del pacto de hombres. No la pudimos incluir como proveedor porque ustedes que tanto se jactan de velar por condiciones de trabajo, no cumplen con pagarle a la CCSS, no tienen a sus trabajadores en la póliza del INS. Ser PYME, ser solo mujeres o ser tan ingenuas de empezar a trabajar sin tener nada firmado, no les da derecho a recibir pago completo de labores que no concluyeron incluso cuando les damos más tiempo.

Que prefiero que me paguen a mí a nivel personal que estoy inscrita en la CCSS como trabajador independiente/ Lo vamos a hacer como excepción y para salir de esto, pero no deberíamos hacerlo porque nosotros buscamos a la empresa, no a usted, y al hacerlo así, somos parte de lo que le permite a usted seguir evadiendo el pago de sus obligaciones legales.

Si en realidad es una empresa pequeña, especializada en servicios, este berrinche no les ayuda. Mi cliente no quiere saber nada más de ustedes. Ellos y yo quedamos con la peor de las impresiones. Ellos y yo podremos decirle a gente que la quiera contratar que tengan cuidado.

Y para mi saco: cuando no quieren trabajar con uno, hay que ser el oso más vivo del bosque y no ponerse tarado a reclamar. El reclamo no cambiará la decisión y solo te afecta a futuro.

Y vos, ¿qué pensás?