Silencios
Le dije que me iba el 9.
Ni siquiera me preguntó el dónde.
Este post apareció el jueves 2 de junio, 2005 a las 2:24 pm dentro de la categoría Sin categoría.
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junio 2, 2005 a las 5:18 pm
Definitivamente, no hay nada más complicado que el corazón de una mujer. ¿Para qué insistís?
junio 2, 2005 a las 7:37 pm
Espero que por lo menos parpadeara cuando le dijiste «el cuándo».
junio 3, 2005 a las 3:16 pm
Si por lo menos parpadeara, me liberaría. Son sus ojos y su mirada intensa lo que me mantiene atada.
junio 3, 2005 a las 8:38 pm
Cuervos…eso es lo que necesitas… cría le cuervos.
junio 4, 2005 a las 9:35 am
Cuando se está en ese lugar es imposible no insistir, pero un día amanecemos con dignidad y zaz, al carajo con él. Mientras tanto, apoyen, apoyen…
junio 4, 2005 a las 11:19 am
Gracias Sirena! Yuré, si conseguimos un pichón de cuervo, además de cumplir con su deber, habría que enseñarle a decir: Nevermore…