Jetz, aber grün /Verdes, pero a las ya!
Hay árboles en cada acera. Hay verde hacia cualquier parte que uno mire, salvo hacia el horizonte, donde como en portada de disco de Pink Floyd, se alzan dos chimeneas de plantas nucleares.
Ya conocí los míticos tres basureros que sirven para reciclar dependiendo del origen del desperdicio. Había en el hostal, en la estación de tren, en todo lado. Aquí la basura no es basura, es algo más que se selecciona y se reusa.
No hay aire acondicionado ni ventiladores. Se duerme con la ventana abierta, uno anda en chancletas y con ropa holgada y fresca.
Todo está hecho para ir caminando a cualquier lado. Y si le da pereza, ahí puede escoger entre una bici o un tranvía eléctrico.
Hoy tomamos té ecológico. Ayer vimos una tienda solamente de productos Bio, es decir, amigables con el ambiente. Desayunamos con pan integral delicioso. La jalea no tenía preservantes. Estamos en medio de un país donde la conciencia ecológica no es ni moda ni se reserva para utopistas: es una realidad, un hecho cierto.
agosto 18, 2009 a las 4:47 pm
Eso de té ecológico suena como a bolsita reusada varias veces con agua calentada en una estufa de boñiga… not very appetizing. Por lo demás, así como tengo catalogada de fea la comida alemana, los panes integrales (y sobre todo los caseros) no tienen abuela!!! Bon appétit!
agosto 19, 2009 a las 10:39 am
Nada de eso! es té que creció de forma amigable con el ambiente! pero es curioso que son tan obsesivos con eso.
agosto 24, 2009 a las 3:01 am
Sole, yo aca compro pan aleman integral para la semana. Sin ellos, no sabe la cosa a pan.
Y aca tambien se consume mucho producto aleman ecologico y organico. Desde jabones hasta las jaleas y tes. Mmm.
Ahorita se acostumbra a lo de la basura. Yo digo que es una forma de integrarse a la comunidad.