Nuevas ocupaciones
De punchin’ ball : Porque es regla que los idiotas no conectan el cerebro con los dedos y se mandan con un correo lleno de insultos y groserías, que si fuera hombre se lo contesto a pichazos, pero como soy mujer, me toca ser decente y la mejor parte, aunque sea él el que se comporta como una hembra histérica en pleno despecho.
De todóloga: juicios de tránsito, civiles, licitaciones, penal, marcas, zona franca, mensajería, laboral, corporativo, elaboración de cartas, traducción, terapia. De todas esas, tengo experiencia como en dos, hago bien algunas más, en otras recién incursiono y habrá alguna en la que hago educated guesses, o sea, bateo. Pero se lo advierto al cliente.
De nejas víctima de la publicidad: porque sí, voté en Latin American Idol y qué? Y compro la mantequilla que nadie puede creer que no es mantequilla y la jalea dependiendo del color del colorante artificial y el jugo de naranja que dice que viene directo de Florida.
De juega e’chiquilla: me estoy sospechando que esa distancia tan helada que hay entre Facebook y yo es un problema o un guindo generacional. No le entiendo la gracia.
De osito de peluche: El Patán va a declarar en un juicio y se muere de miedo. Entonces me pide que vaya a la reunión donde lo van a preparar y que lo acompañe a la audiencia, aunque no haga nada yo como abogado. Es solo la compañía. La seguridad de verme ahí sentadita con cara aburrida y con ganas de irme a comer.
octubre 15, 2008 a las 11:08 pm
Justo hoy me siento como ese osito… :S
Yo terminé teniendo cuenta en el feisbuk básicamente por presión social. Y sí, porque todos tus compas lo usan y blá. Pero desconozco en absoluto su «grandioso» potencial como herramienta para ligar. No la veo con eso. Debe ser la maldición para quienes conocimos estas cosas después de los treinta.
También me había abierto otra cuenta en el Hi5 pero cuando me dí cuenta que eso es el patio virtual del cole lleno de pubert@s con calentura hormonal, me aguevé y lo mandé a volar…