Mucho más temprano que tarde, de nuevo se abrirán las anchas alamedas por donde pase el hombre libre para construir una sociedad mejor.

Frente al espejo roto

Se sentaba noche a noche
a peinar los recuerdos
setenta veces siete
como el perdón
a veces alguno se enredaba en el peine
a veces se encontraba uno que otro gris o pálido del tiempo
a veces se daba cuenta que a algunos, los estaba perdiendo
a veces, los reventaba cuando se rebelaban en nudos molestos
a veces los acariciaba para invocar sus olores
Atrás, el mar, le ayudaba contando
uno
dos
tres
Muchos recuerdos

Nota de Sole: Yuré; as per your kind request y aprovechando el mood de melancolía que me aqueja…

10 gotas de lluvia en “Frente al espejo roto”

  1. ilana dice:

    Sole, aquí hay reminiscencias de un poema malo que dejé volando por ahí… claro, no se semeja en la calidad ya que éste es de primerísima calidad emocional.

  2. Oscar dice:

    Evocás bellamente las imágenes con tus palabras, Sole. Espero, sin embargo, poder volver a leer algo acometido con tu usual vigor y chispa muy pronto. Se dice que la oscuridad es siempre mas profunda justo antes de que raye el sol, pero nuestras simas nos definen tanto como nuestras cimas. En ninguno de ambos casos tu talento no sufre merma, para nuestro beneficio.

  3. K@ren_cr dice:

    Prestame el peine, porfis!

    Y que el mar me haga porras!

    Me encantó!

  4. yuré dice:

    A nuestra Alfonsina le encantaría tanto como a mí.

  5. Dean CóRnito dice:

    Si tan solo Alfonsina hubiera sabido que con un peine resolvía el asunto!

  6. Solentiname dice:

    Es que Alfonsina lo fue a buscar al mar.

  7. Jorge Marín Hernandez dice:

    Hola. Disfrutamos mucho de tus escritos. Gracias, Sole.

    La idea del espejo roto que distorsiona al recuerdo me parece muy rica en su caracter evocativo. Conozco el caso de algunos amigos que solamente han llegado a lograr la paz con sus recuerdos con el paso del tiempo. Hay gente que cree que esto es parte del proceso de “madurar”, creo más bien que es parte del proceso de distorsión, en parte, impulsado por el psicoanalisis y el tomar Prozac y Xanax, inevitable en toda historia que se detiene, que uno le imparte a sus recuerdos cuando el tiempo y la distancia crecen de los mismos. ¿Es realmente la persona que analiza o siente el recuerdo de querer a alguién apasionadamente, por primera vez, la misma que quiso, sin saber de consecuencias buenas o malas, a ese alguién? Quizá en ese momento sea cuando el espejo se empiece a romper, y la risa que en su momento nos crispaba los nervios, se vuelve parte del encanto que tuvo ese alguién o los que con el pasar de los años modifican sus ideales, y buscan su paz en la droga burguesa del consumo y de la obscena posesión de objetos muertos, y atribuyen a fiebres juveniles ciertas obsesiones como la justicia social. Quizá sea ahí en que comprometemos la verdad y la calidad de nuestros deseos y aprendemos a vivir en paz, por tener una noche tranquila de sueño, un día “productivo de trabajo”, o, como dice Pablo Milanés, una relación sin conflictos:

    Porque el tiempo pasa
    Nos vamos poniendo viejos
    Yo el amor
    No lo reflejo como ayer
    En cada conversación
    Cada beso cada abrazo
    Se impone siempre un pedazo
    De razón

  8. tugocr dice:

    Para mi lo importante de esto es el sentir que sale de uno y a través de uno el mundo, el conocer y utilizar la razón dentro de la vida es apenas el primer picotazo que rompe el huevo.

  9. Otrova Gomas dice:

    Yo siempre me peino frente a un espejo roto. La primera vez que me vi en ese espejo, el espejo dijo: tú eres el más feo del reino, y acto seguido se quebró.

  10. Sirena dice:

    ¿De cuál reino Otrova?

Y vos, ¿qué pensás?